Es una buena fuente de proteína vegetal y rica en minerales esenciales.
Sus hidratos de carbono te ofrecen energía lentamente y la mitad de sus grasas son ácido linoleico, beneficioso para el corazón.
En el desayuno
Lava la quinoa, ponla a cocer y, una vez lista, déjala enfriar. Añade manzana, nueces y uvas, y endulza con miel.
Versiona un clásico
Prepara pimientos rellenos de quinoa. Asa unos pimientos rojos al horno y pélalos. Rehoga cebolla picada y pimiento verde y añade un poco de vinagre de Módena. Retira, mezcla con la quinoa cocida, salpimienta y rellena los pimientos asados con esta preparación y queso feta desmenuzado.
Tortitas
Es un buen recurso para aprovechar la que te haya sobrado. Mecla una taza de quinoa con verduras, un huevo, pan rallado, queso parmesano rallado, tomillo, aceite, pimienta y sal. Forma unas tortitas y hornéalas.